En TraumAstur, estamos aquí para ayudarte. Si sufres de alguna de las deformidades descritas u otra condición del pie, no dudes en contactarnos. Nuestro equipo está altamente especializado y listo para ofrecerte una consulta personalizada y diseñar el mejor plan de tratamiento para ti.
El neuroma de Morton es una afección dolorosa que afecta el nervio plantar que va a los dedos del pie, generalmente entre el tercer y cuarto dedo. Se produce cuando el nervio se comprime o irrita, lo que puede resultar en dolor, ardor, hormigueo o entumecimiento en la zona afectada.
Entre las causas más comunes se encuentran el uso de calzado ajustado, actividades deportivas de alto impacto. El tratamiento puede incluir cambios en el calzado, fisioterapia, medicamentos antiinflamatorios o, en casos más severos, cirugía.
En TraumAstur, combinamos la tradición con la innovación para ofrecerte soluciones modernas y efectivas para el tratamiento del Neuroma de Morton.
Además, somos el único equipo médico especializado en tratamiento y cirugía de pie y tobillo en todo Asturias.
Dolor agudo o punzante:
Sensación de dolor intenso en la zona del neuroma, especialmente al caminar o al usar ciertos tipos de calzado ajustado.
Sensación de quemazón:
Sensación de ardor en la parte delantera del pie, que puede irradiarse hacia los dedos.
Entumecimiento o hormigueo:
Sensación de entumecimiento o cosquilleo en los dedos, especialmente en el área donde se encuentra el neuroma.
Sensación de tener un bulto:
Puede sentirse como si hubiera una piedra o un objeto en el zapato o dentro del pie.
Empeoramiento del dolor con la actividad:
Los síntomas suelen empeorar con actividades como caminar, correr o estar de pie durante mucho tiempo, especialmente con calzado ajustado o de tacón alto.
Alivio al quitarse los zapatos:
Muchas personas notan un alivio inmediato del dolor al quitarse los zapatos o al masajear el pie.
En TraumAstur, utilizamos una combinación de exploración física y estudios de imagen, como ecografía y RM, para diagnosticar el neuroma de Morton y así determinar el mejor plan de tratamiento para cada paciente.
En TraumAstur nos enfocamos en ofrecer tratamientos personalizados que pueden incluir opciones conservadoras y quirúrgicas:
El tratamiento del neuroma de Morton puede variar según la gravedad de la afección y la respuesta a las terapias iniciales. Algunas opciones de tratamiento incluyen:
Tratamientos conservadores:
Cambio de calzado: Usar zapatos con punta ancha y suelas acolchadas que no compriman los dedos y permitan que el pie tenga más espacio.
Plantillas ortopédicas: Las plantillas personalizadas o almohadillas metatarsales pueden ayudar a distribuir la presión de manera más uniforme y aliviar la presión sobre el neuroma.
Descanso y modificación de actividades: Reducir o evitar actividades que agraven el dolor, como correr o estar de pie por largos períodos.
Aplicación de hielo: Puede ayudar a reducir la inflamación y el dolor en la zona afectada.
Tratamientos médicos:
Medicamentos para el dolor: Analgésicos de venta libre como ibuprofeno o paracetamol pueden ayudar a controlar el dolor.
Inyecciones de corticosteroides: Pueden reducir la inflamación alrededor del nervio y aliviar el dolor de manera temporal.
Terapia física:
Ejercicios de estiramiento y fortalecimiento: Pueden ayudar a mejorar la movilidad y reducir la presión en la zona afectada.
Masajes terapéuticos: Ayudan a reducir la tensión y mejorar la circulación en el pie.
Tratamientos quirúrgicos:
Neurectomía: Si los tratamientos conservadores no son efectivos, la cirugía puede ser necesaria para extirpar el neuroma. Esta opción se considera cuando otras medidas no han logrado aliviar el dolor.
Descompresión del nervio: Otro procedimiento quirúrgico consiste en cortar ligamentos cercanos para aliviar la presión sobre el nervio afectado.
| Responsable del tratamiento | Andrés Sierra Pereira |
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Puede ser causado por factores como el uso de calzado ajustado o de tacón alto, actividades de alto impacto, deformidades en el pie (como pie plano o arcos muy altos) o una lesión.
Sí, usar calzado adecuado, evitar tacones altos y proteger los pies de lesiones puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollarlo.
Como cualquier procedimiento quirúrgico, puede haber molestias durante la recuperación, pero suele ser manejable con analgésicos y cuidados postoperatorios.
Se recomienda usar zapatos calzado de horma ancha y plano.
En algunos casos, los síntomas pueden mejorar con el reposo y cambios en el estilo de vida, pero un neuroma más avanzado puede requerir tratamiento médico.
La recuperación puede variar, pero generalmente lleva de 6-8 semanas para volver a actividades normales, y varios meses para una recuperación completa.
Sí, es una afección relativamente común, especialmente entre personas que practican deportes de alto impacto o usan calzado inadecuado.
Aunque es más común en un solo pie, en algunos casos puede afectar ambos.
